Soy Delirium Tremens — el elefante rosado original, nacido en 1989 como un audaz experimento creado para desafiar la tradición.

En aquel entonces, la cerveza belga era algo serio, solemne, casi sagrado.
Pero Brouwerij Huyghe quiso romper las reglas.
Me dieron un nombre surrealista, un símbolo provocador y un perfil peligrosamente irresistible: frutal, especiada y dorada como el sol, ocultando tras su suavidad un 8.5% de alcohol.
Los críticos la llamaron locura.
Luego gané el título de “Mejor Cerveza del Mundo.”

Estoy elaborada con tres cepas de levadura belga, y me sirvo con una espuma blanca y viva.
En mí encontrarás notas de banano, pera, cítricos y especias cálidas, que giran y despiertan los sentidos con cada sorbo.
Comienzo suave, termino seca y con un toque amargo equilibrado, dejando en el paladar una sensación viva y sonriente.
Hay una razón por la que me convertí en un ícono global — de Bruselas a Hong Kong, llevo alegría, energía y un toque de delirio rosa a donde voy.

Entra en mi mundo — donde las burbujas bailan, los elefantes son rosados, y la cerveza nunca es ordinaria.